La evaluación es un fenómeno educativo que condiciona todo el proceso de enseñanza y aprendizaje. No se trata de un fenómeno esencialmente técnico sino de un fenómeno ético. Por consiguiente, resulta indispensable preguntarse a quién beneficia cuando se hace y a quién perjudica; a qué valores sirve y qué valores destruye. La evaluación puede servir para muchas finalidades. Lo importante es utilizarla como aprendizaje, como un modo de comprender para mejorar las prácticas que aborda. La metáfora de la flecha en la diana sirve para comprender, de manera palmaria, que se puede hacer evaluación para clasificar, comparar, seleccionar o, sencillamente, calificar. Es necesario, sin embargo, utilizarla para aprender y para mejorar el aprendizaje de los alumnos, la dinámica de los centros, la formación de los profesores y la implantación de las reformas.
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Índice
Extracto del Índice: 1/ La evaluación como aprendizaje: Principios generales de la evaluación. 2/ Evaluación y centros educativos: Los riesgos, los evaluadores, las condiciones, los indicadores, las exigencias, las iniciativas, las consecuencias. Cultura que genera la evaluación en las escuelas. Metaevaluación de las escuelas: el camino del aprendizaje, del rigor, de la mejora y de la ética. 3/ Evaluación y profesorado: Evaluación del sistema y aprendizaje del profesor. Evaluación de la formación del profesorado. Evaluación de las Reformas Educativas. Dime cómo evalúas y te diré qué tipo de profesional (y de persona) eres. Algunas conclusiones encaminadas a mejorar la práctica. 4/ Bibliografía.
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