Violeta es una universitaria que huye del hombre que la
acosa y regresa al pueblo junto a sus padres. Esta premisa nos abre las puertas
a un universo de una autenticidad que somete al lector. "Tierra
adentro" avanza por caminos que se van estrechando a golpe de página y se
enredan alrededor de tus brazos tirando de ti. Cuando leo espero este milagro
que la mayoría de las veces no sucede. La mayoría de los libros nacen inertes,
sin vida, encerrados en la planicie de sus páginas, vacíos. Pero hay otros que
con solo unas líneas leídas se hacen corpóreos, comienzas a ver, como si de un
cuerpo humano se tratara, los órganos, los huesos, el libro en definitiva cobra
vida y se hace físico, lo puedes tocar y no me refiero a sus páginas, acaricias
su alma, su sistema nervioso es una extensión del tuyo. Esto sucede con Tierra
adentro.
Tierra adentro habla del miedo, del dolor, de
la pérdida, también del pasado, de recuerdos que se diluyen y que en su lucha
con el presente son destruidos sin compasión.
A través de los ojos de Violeta seremos testigos del derrumbe físico y
emocional de una comunidad rural que nada tiene que ver con esos anuncios neo
hippies que olvidan la tradición y en ocasiones el encorsetamiento de sus
gentes. Lo rural aquí es seco, distante, salvaje. Cada vecino descrito por
Morella representa un eslabón de una cadena que ahoga a Violeta que en su
intento por huir del minotauro se pierde más en el laberinto.
En la
actualidad, como librero, he sido testigo de un avance alucinante de la
literatura femenina y feminista escrita por mujeres y no hablo de ensayos
concienzudos, hablo de novelas, de relatos. Son varias las escritoras que me
han puesto un nudo en la garganta y a las que no podré olvidar. Y pensando en
ello me observo reticente a obras escritas por hombres y que protagonizan
mujeres. Este prejuicio inexistente en mi juventud ante los inolvidables
retratos que de mujeres realizaban gigantes como Henry James, Tolstoi o
D.H.Lawrence ha sido derribado por José Morella. El cariño, la delicadeza con
la que cuida a su Violeta y la lleva de la mano es algo emocionante.
Y al final, la narración desemboca en uno de esos finales que permanecen y que te obligan a volver atrás y releerlo.
Como dice Poniatowska, José Morella escribe con sencillez poética y sobre todo con una anti-solemnidad que es lección a seguir.
Opiniones
Opiniones
Novelón
La batalla silenciosa del progreso
Leí tierra adentro del tirón. Es una de esas novelas que te agarran en la primera página y no te sueltan. Quizás porque ese pueblo Comerga, se vuelve un poco tuyo. Y porque personajes como Molina, o como la prota, Violeta, se vuelven tan familiares que los empiezas a echar de menos antes de que la novela se acabe. Hace tiempo que no disfrutaba tanto con una historia. Y El final... es de esos que no se olvidan. (Ni se te ocurra hacer spoiler :D
very interesting
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