Una indagación en los laberintos de la culpa, la identidad y el alma humana a través de una inquietante historia de obsesiones.
Pocos días antes de morir en un accidente, Guillermo le confiesa a su amigo Eusebio que mantiene relaciones sexuales sadomasoquistas con una misteriosa mujer. Al cabo del tiempo, y por azar, Eusebio decide buscar a esa mujer para contarle que Guillermo ha muerto y que por lo tanto nunca volverá a llamarla. Y cuando la encuentra se queda hechizado por ella. No se atreve a decirle nada para no tener que desvelar los secretos que conoce, para no ahuyentarla. Poco a poco se van enamorando. Eusebio espera que ella le pegue, le humille y le maltrate sexualmente como hacía con Guillermo, pero Julia sólo le da caricias y ternura. Ése es el principio de la terrible duda que se abre paso en los pensamientos de Eusebio: ¿una y otra son la misma mujer? ¿La que azotaba con un látigo a Guillermo y la que se abraza a él sosegadamente son la misma persona?
La mujer de sombra es la historia de una obsesión y de un camino hacia el infierno. Es una novela sobre el secreto, sobre la culpa y sobre la identidad. En ella, Luisgé Martín vuelve a indagar en los laberintos más oscuros del alma humana y a pintar esos dilemas existenciales en los que tanta importancia tienen las pasiones sexuales heterodoxas, que están siempre en la frontera de toda moralidad y toda ley.
Ya estamos en verano, el mejor momento para volver a leer la poesía de José Hierro. ¡Qué bonita es la edición de Nórdica con las ilustraciones del propio Hierro! Como también lo es de edición de Xingú. Y lo de Santiago Gascón no tiene nombre, se ha puesto a contar las peripecias de sus niños y se ha metido a todo el mundo en el bolsillo. Diferente es la nueva novela de Luisgé Martín: preparen el cuero, el látigo y una fiambrera para pasearse por el infierno, cuestión a la que ya suele estar acostumbrada Pilar Pedraza, aunque esta vez nos lleva al circo. No fallan a su cita lo nuevos de Libros del asteroide, Sajalín, Periférica y Alpha decay: la fuerza de las editoriales indie. Y terminamos con una bienvenida: ha nacido con más que buen pie la editorial Automática.
Valoraciones y comentarios
No hay comentarios, sé el primero en comentar