Este libro es un nostálgico canto a la amistad, a la comida, a la amabilidad y a las segundas oportunidades.
Cocidas, en puré, asadas o fritas, el señor Doubler lo sabe todo sobre las patatas, pero no se puede decir lo mismo de las personas. Desde que perdió a su esposa vive solo en la granja Mirth y él está encantado. Las multitudes son para otras personas. La única compañía que necesita son sus patatas y la señora Millwood, su asistenta, que le visita todos los días.
Así que cuando esta se pone enferma todo se desmorona para él, y el señor Doubler empieza a pensar que a lo mejor ha perdido su camino, ¿pero podrá la amabilidad de las personas extrañas hacer que salga de su burbuja?
Opiniones
Opiniones
No hay comentarios, sé el primero en comentarValoración media
¿Has leído este libro?
Valóralo y comparte tu opinión con otros usuarios
Escribir mi opinión